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Escrita por: kermit94



Ficha en MAL

Saludos cordiales, estimados lectores. El día de hoy vengo con una reseña de una serie basada en uno de los mangas shoujos más queridos de las últimas décadas. Se trata de Skip Beat, serie que ha conquistado los corazones de los lectores como para seguir siendo relevante a casi 20 años de iniciada su publicación y después de dejar su adaptación animada incompleta, sin ningún indicio de una continuación, hace ya más de una década. Veamos qué es lo que tiene esta serie que la hace tan especial.

Trama 



Kyouko dejando salir toda su malicia reprimida

La historia se centra en Kyouko Mogami, quien dejó toda su vida atrás para poder permanecer al lado del chico de quien está enamorada desde su infancia, Shou Fuwa. Éste está intentando hacerse un nombre en la industria del espectáculo como cantante y modelo, y Kyouko se ocupa de atenderle y complacer cada capricho que tenga, siendo poco más que una sirvienta glorificada. Eso hasta el día que escucha una conversación de Shou admitiendo que solo la está utilizando y no siente absolutamente nada por ella.

En lugar de quebrarse y ocasionar que la serie caiga en el camino del melodrama, como cabría esperar, Kyouko da rienda suelta a todos sus sentimientos e impulsos oscuros, jurando vengarse y lograr alcanzar un nivel de fama superior al de Shou para poder restregárselo en la cara. El resto de la serie sigue a la protagonista mientras escala la pendiente de la fama para poder cumplir su objetivo.

Bueno, con esto queda claro el tono de la serie. Todo está más inclinado hacia el lado de la comedia y en seguir las desventuras, que pueden pasar de verosímiles a completamente ridículas en el lapso de unos cuantos episodios. Esto significa que la serie no intenta ni por asomo mostrarnos de manera realista cómo es la búsqueda de la fama en el mundo del espectáculo. Las situaciones son muy exageradas a favor de los momentos graciosos, y en este mundo el ímpetu, la perseverancia y la pasión son más lo importante para conseguir el éxito.

Lo cual es bastante adecuado para nuestra heroína. Kyouko, después de reinventarse y tener un cambio de look extremo, pasa a ser extremadamente carismática, y adopta una manera de hablar grandilocuente y gestos dramáticos que vuelven hasta las más mundanas situaciones en un festival de locuras.

Entonces, para saber si la serie es para ti, pregúntate si buscas una mirada madura y realista al mundo de la fama y el espectáculo, con progresión y seriedad, o si buscas simplemente una comedia con personajes estrafalarios y situaciones muy divertidas, pero con un avance indudablemente lento. Si perteneces al primer grupo, ni te acerques a este anime. Si perteneces al segundo, entonces puede que esto sea lo que estés buscando.

Otro punto a tener en cuenta es que la adaptación está muy incompleta, y termina abruptamente en medio de un arco, sin llegar a cerrarlo del todo. Esto significa que el anime puede ser una buena introducción para que uno se fije si le agrada el estilo de la obra, y en caso de ser así, pueda adentrarse en el manga (desde el capítulo 68, que es el último que adapta el anime).

Animación y Sonido 



Esas risas malévolas sí se pueden escuchar

Bueno, en cuanto a animación la serie no es ninguna maravilla, pero tampoco se siente barata ni nada. Simplemente algo de lo que no vale la pena mucho hablar. Los diseños de personajes, por el contrario, son distintivamente “shoujos”. Con eso me refiero a que visualmente, es fácil notar la demografía de esta obra. Sobre todo con los hombres y sus caras cuadradas.

En cuanto al sonido, se me hace curioso que una serie que incorpora el mundo pop como uno de sus temas carezca de una canción que considere llamativa. Bastante soso en ese aspecto el anime, aunque no es que sea algo tan importante.

La actuación, por el contrario, me parece una maravilla. Hay que tener talento para interpretar a Kyouko, con sus cambios de humor, sus gritos despavoridos, su entusiasmo sin freno, su dramatismo en general. Mis felicitaciones para Marina Inoue en ese aspecto.

Personajes 



El trío protagonista

Bueno, como dije, tu disfrute de la serie depende en gran medida de qué tan bien te caiga la protagonista. Es lo más llamativo de la obra, sin dudas. Se trata de una joven de 16 años que decide dejar de ser una esclava glorificada y volverse una joven fuerte e independiente. Suena cliché, pero lo que la hace especial es que la prota está completa y absolutamente loca.

No exagero. Tiene toda la locura y malicia de una mujer despechada en busca de venganza, es aficionada a los muñecos vudú, tiene un aura malévola que haría sonrojar a cualquier villano de anime, y aprovecha cada situación para acercarse más a su meta. Y sin embargo, es una persona muy amable y llena de vitalidad y positividad cuando la situación no tiene nada que ver con Shou. Supongo que podríamos catalogarla como una bola de dulzura con tendencias oscuras de lo más entretenidas.

Pero esa positividad, y aquel deseo de complacer a los demás por la necesidad de sentirse apreciada, tienen sus raíces en la gélida y complicada relación con su madre. Durante todo el anime, la tumultosa relación de la protagonista con su madre siempre está en segundo plano, pero presente. Esto, unido a una falta de amigas al crecer, hace que la heroína tenga un pasado trágico, cuyas consecuencias no son del todo exploradas en el anime, lamentablemente.

El personaje aparte de Kyouko que más tiempo de pantalla recibe es Ren. Se trata de alguien que ya es un actor reconocido y respetado, toda una estrella debido a su talento y dedicación. Dado su carácter estoico, provee una buena contrapartida al colorido carácter de la protagonista, a quien pone constantemente a prueba para saber que tan seria es su convicción de ser una actriz famosa. Esto ocasiona una especie de amor/odio entre ambos, además de los típicos malentendidos interminables que podríamos esperarnos de este tipo de series. Sin embargo, ambos tienen el don de sacar lo mejor del otro, dando pie a una particular relación.

Para cerrar el trío protagonista está Shou. Su característica principal es ser un cretino desagradable, que usó sin miramientos a Kyouko toda su vida y la desechó a la primera oportunidad. Bien, dado el odio que ésta le tiene, cada encuentro que tienen estos dos después de su pelea inicial es ORO PURO. De hecho, podría incluso animarme a decir que lo mejor de la serie, son los bizarros momentos que ambos comparten en pantalla. Ver perder los estribos a la protagonista cada vez que tiene que cruzarse con este individuo, y verla poner en práctica sus planes para desprestigiarlo es ciertamente hilarante.

En resumen, si te van los personajes carismáticos y que suelen protagonizar situaciones absurdas a diestra y siniestra, estos sin duda lo cumplen. Sin embargo, no son de los que tienen motivaciones muy entrañables, ni tampoco enfrentan problemáticas verosímiles. Como vengo diciendo, si buscas eso, acá lo vas a encontrar a cuentagotas.

Conclusión 



Kyouko en un traje de pollo. Un día normal en el mundo de Skip Beat!

Voy a parecer disco rayado, pero lo primero a considerar para saber si esta sería una serie de su agrado es si están buscando algo realista o no. Una vez lo sepas, y si te gustan los personajes tan chiflados como acabo de describir a Kyouko, no harías mal en darle una oportunidad a esta serie. Es simpática y dinámica, con la gran desventaja de que solo adapta una pequeña parte del manga. El lado bueno es que, si les llega a enganchar, tienen un montón de material disponible en el manga. El lado malo es que éste tampoco muestra signos de acercarse a su final, así que, ¡no esperen una conclusión en el futuro cercano!

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