Reseña: Battle Royale

Escrita por: kermit94

Introducción

Un saludo cordial a todos. Con la popularidad que el género Battle Royale ha estado recibiendo en el mundo de los videojuegos en el último año, aprovecharé para reseñar uno de los primeros mangas que leí. Se trata de la adaptación de la novela que definió el género de tal manera que éste lleva su nombre. Y es que, aún después de tantos años, esta franquicia sigue marcando el estándar de lo que cabe esperar en obras de este género. ¿Será tan especial como para haber inspirado, y hasta ser objeto de plagio, de tantas obras posteriores? Averigüémoslo.

Argumento

Encantador, ¿no?

La historia se sitúa en un Japón regido por una brutal dictadura, la cual escoge una clase de escuela cada año, la rapta, y la lleva a una isla para que se maten entre sí hasta que solo quede una persona en pie. Encantador, ¿cierto?, y a estas alturas parece la cosa más trillada que hay. Pero hay que considerar que se trataba de una idea muy novedosa cuando salió, en 1999. De hecho, el simple hecho de poner a unos adolescentes masacrándose de la manera más sangrienta posible causó toda clase de revuelo en su época, y su controvertida adaptación a la pantalla grande es muy influyente en el cine de acción violenta.

Pues bueno, estamos aquí para hablar específicamente del manga. Para ello, lo primero que deben saber si están interesados es que es brutalmente violento. No se esconde en lo absoluto al momento de mostrar vísceras, desmembraciones y violaciones (a ambos sexos, además) con todo lujo de detalles. Si una obra alguna vez fue merecedora del adjetivo “edgy”, es ésta. Uno puede intentar todo lo que quiera encontrar un mensaje en contra de la dictadura y el abuso entre sus páginas, y aún así no va a poder negar que todo el gore presente en ellas tiene como finalidad despertar los sentimientos más morbosos del lector.

Esto puede verse como una forma de mostrar como los individuos con menor fortaleza emocional reaccionan ante situaciones límite, mostrando lo bajo que pueden caer los humanos cuando son víctimas del miedo. De hecho, eso justamente es parte del objetivo del gobierno al organizar esta matanza. Pero al momento de leerse el manga da más la impresión de que el objetivo es mucho más rudimentario. Presentar a un personaje, hablar un poco de su vida y su motivación, darle un pasado traumático si es posible, y luego matarlo de una manera horrenda o irónica. Este truco es repetido durante por lo menos la mitad de la obra, y puede volverse cansino al ser utilizado tanto.

Otra cosa digna de mención es que, a pesar de toda la brutalidad del manga, éste puede ser muy cursi de vez en cuando. Hay ciertos detalles que causan que el lector se detenga un momento y ruede los ojos ante algo tan infantil. Por ejemplo, la música rock n’ roll está prohibida en el país, por lo que el prota es todo un niño rebelde por saber tocar la guitarra. Vamos, díganme que el hecho de que solo esa música se mencione como prohibida no les causa algo de gracia. Luego está el hecho de que, mientras la mitad de los personajes han sido víctimas de terribles experiencias y pasados traumáticos, otros demuestran una inocencia y optimismo casi surreal, siendo extremadamente puros y con diálogos sobre el poder de la amistad y demás cosas. Naturalmente, siendo el tipo de obra que es, esto no puede acabar bien para todos.

Esto termina dando una sensación aún mayor de que lo que les sucede a todos es para causar shock y repulsión de manera barata. Seguro, muchas veces los inocentes son los que más sufren en los regímenes totalitarios, pero mostrarlos de esta manera te desensibiliza, ya que solo estás a la espera de que la pobre víctima que acaba de ser introducida muerda el polvo, cayendo ante los alumnos que no temen ensuciarse las manos.

En resumen, una historia llena de muerte y sufrimiento, ideal para los morbosos que gusten de una gran crudeza y de maltrato psíquico y emocional hacia los personajes, además del maltrato físico. Si tienes poca paciencia para ver un montón de muertes de personajes con caracterización muy básica, y la violencia no te llama la atención, es poco probable que te llame la atención la trama.

Apartado visual

Transmite degeneración con su diseño, realmente.

La verdad es que el arte de este manga no está mal. Seguro, difícilmente encontrarás paisajes de ensueño cuando toda la historia transcurre en una isla bastante plana y sin particularidades aparentes. Pero el mayor mérito de la obra está en hacer ver a los personajes sufrir de la manera que lo hacen de manera realista.

Sin que sus diseños sean particularmente inspirados, posee un estilo que calza a la perfección con el tipo de historia que es ésta. Y el rango de emociones que pueden articular los personajes es notable. Sus expresiones al sentir dolor o sufrimiento me parecen notables.

Aparte de eso, considerando que el 90% de los personajes son carne de cañón a la espera de una muerte sangrienta, no podemos esperar que tengan diseños muy llamativos. Sin embargo, hay algunos personajes diseñados de manera muy bizarra, con labios enormes o rasgos faciales extraños. Algo curioso.

Personajes

Los personajes que son relevantes. Sí, le corté la cara al prota, y no importa

Muy bien, antes que nada, saquémonos algo de encima. El protagonista apesta. Es plano, extremadamente aburrido y eclipsado totalmente por su grupo de amigos. Ni siquiera tiene la excusa de ser así de soso para que el lector se auto-inserte en la historia a través de sus ojos. ¿Quién querría formar parte de un mundo tan podrido como éste?

La cosa es que Shuuya se ganó a pulso ser el segundo personaje más impopular entre los lectores de entre los personajes principales. Su diseño es aburrido, no hace nada durante el 80% de la duración del manga (no es broma, el tipo se la pasa escondido casi todo el tiempo) y carece de una personalidad definida, a diferencia de los demás. Lo que podemos decir de él después de más de 120 capítulos es que es muy buen tipo (al punto de rayar en lo ñoño, pero de igual manera todas las chicas parecen amarlo y los chicos admirarlo), y que le gusta el rock n’ roll. Eso es todo. Aburrido, ¿cierto?

Pero como dije, hay alguien aún menos interesante, y se trata de su interés romántico, Noriko. Su rol es aún más enfurecedor porque se limita a ser la chica del grupo que no pierde la esperanza ante ninguna situación, pero a la larga no hace mucho. Una novia cuyas líneas parecen intrascendentes y molestas, y cuya única finalidad en la historia es que el prota mantenga su resolución de escapar con vida a estos sucesos.

Mejor olvidémonos de ellos, al igual que el mismo manga durante casi toda su duración, y enfoquémonos en otros personajes que, si bien tampoco tienen tanta sustancia, son mucho más memorables que estos dos.

Primero está Kiriyama, un estudiante frío como el hielo y carente de escrúpulos que es más difícil de matar que una cucaracha y más poderoso que todos los Terminator juntos. Este es un personaje que decide participar activamente de la matanza y cargarse a todo aquel que se cruce en su camino sin demostrar emoción alguna. Ya, como dije, ninguna obra maestra de la caracterización, pero seamos honestos, el objetivo de este manga morboso es mostrar acción descabellada, y este tipo sí que lo logra. Los momentos en los que aparece en escena se vuelven automáticamente 200% más entretenidos, ya que podemos estar seguros de que rodarán cabezas.

Luego podemos mencionar a Shinji, un amigo del prota que es genial en todo sentido y sabe controlar excelentemente cada situación adversa que se la atraviesa, es un don Juan, extremadamente capaz, tenaz y carismático. Vaya, muy diferente al primer personaje en el que pensamos cuando escuchamos el nombre “Shinji”, ¿verdad? Pues se preguntarán, si este personaje es tan genial que eclipsa completamente al soso de Shuuya, ¿por qué no podía ser el personaje principal? Pues la intención del autor era la de engañar al lector, presentando a un personaje que tenga todas las características de un protagonista, pero que termine no siéndolo a favor de un tipo más normal. Muy linda la intención y todo, pero termina siendo una lástima porque, y hablo por todo el mundo que haya leído esto, todos hubiéramos preferido que esta sea su historia.

Mencionemos también a Mitsuko, la típica mujer extremadamente bella que está completamente chiflada y tampoco siente remordimiento alguno en matar (o incluso cosas peores) al siguiente tonto que se cruce con ella. Ella además es la principal fuente de fanservice de la obra, pero les advierto que sus escenas pueden ser muy perturbadoras. Difícilmente la gente disfrute todos los momentos en los que se desnuda, pues estos pueden ser bastante escabrosos.

Y bueno, saltándonos a los otros miembros de la clase que están ahí solo para morir, tenemos al organizador de toda esta matanza, Yonemi Kamon. Este bastardo es uno de los villanos más ruines que vas a poder encontrar, prácticamente Griffith y el Mayor de Hellsing son la Madre Teresa a su lado. De nuevo, no es más que un ser repulsivo que sirve como personificación de toda la corrupción que rige aquella sociedad podrida, pero es muy efectivo en su objetivo de hacer que lo odies con toda tu alma. Personaje no muy bien caracterizado pero entretenido y funcional a la trama, como la mayoría de los que conforman el elenco de ésta.

Conclusión

Te mata cinco veces antes de que toques el suelo

Bueno, no puedo decir que no haya sido una lectura interesante, pero es absolutamente ridícula. Sí, sé que el género no es que busque ser exactamente sutil, pero esto excede todo lo que podamos considerar, de verdad. Pero bueno, dado que al menos hace el intento de tener una especie de mensaje detrás e intenta, aunque sin mucho éxito, darle motivación a las acciones de los personajes, puede ser de los trabajos más recomendables para los que busquen el género Battle Royale.

Pero eso sigue sin ser mucho. Recomendaría darle una ojeada por el morbo si tienen ganas, pero su mensaje de la paz es pretencioso, sus personajes planos, y, dado el género de la obra, su desenlace predecible. Si ya vieron la película, no hay mucho que puedan sacar de esta adaptación al manga, a decir verdad. Por eso, qué tanto disfruten de la obra depende de muchos factores, sobre todo de cuáles son sus expectativas al principio. Pero si buscan un verdadero y profundo análisis social, búsquense otro género. Esto difícilmente los deje convencidos.