Si me preguntaran cuál es el género o temática que menos suelo ver en series o películas diría que es el bélico (de guerras), a veces pienso por qué no lo veo y me doy cuenta que es algo que realmente no quisiera ver, es decir, el tema de la muerte y la guerra que suele ser representada de forma realista y cruda suele dejarme con una sensación depresiva después de verla. Esto es porque la temática bélica nunca nos es indiferente, por lo general se le suele dar un contexto para hacer reflexionar al espectador por las consecuencias negativas que trae la guerra (algunas veces tirando al realismo y otras, a la parodia). Si nos referimos al anime en general, es un tema del que he visto poco pero encuentro mucha simpatía porque suelen cumplir en ejecutar una buena historia con personajes verosímiles al contexto en que están ambientados dejando un mensaje muy potente. Muchas veces cuestionando si nuestra forma de vivir en base a los tiempos modernos (que por estos lares suele estar alejado de las guerras a gran escala) no nos afecta del todo, porque no hemos visto realmente esas situaciones, ni quisiéramos vivirlas.
Pocas veces me pongo a ver un documental del tema, pues todo eso me trae dolor, amargura y tristeza, probablemente porque se ve como una realidad que nos es ajena, pues no sabemos que sintieron exactamente esas personas, esas víctimas, esos niños, esos pueblos oprimidos. Es por ello que hay series y películas que sí pueden tener un efecto mayor en mí, por su tendencia a representar personajes o a un protagonista que vive y siente esa situación directamente, y por consecuencia podemos empatizar con él, y el contexto bélico que vive. En esta oportunidad hablaré de Ima, Soko ni Iru Boku (Now and Then, Here and There), sobre cómo guarda esta relación con lo antes mencionado, y del porqué mi enorme aprecio al dejar un mensaje muy contundente, pero efectivo sobre las consecuencias de la guerra expresado desde el punto de vista de unos inocentes niños.
Datos técnicos
Episodios: 13
Género: Drama, Sci-Fi, Militar
Estudio: AIC
Fuente: Original
Autor:
Dirección: Daichi, Akitarou (Bokura ga Ita, Fruits Basket)
Dirección de sonido: Tanaka, Kazuya (Mushishi, .hack//Quantum)
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Sinopsis
La historia de Ima, Soko (así la llamare para abreviar) empieza como un típico isekai. El protagonista es Shu, un niño que lleva una vida pacífica en su pueblo, va a la escuela, le gustan las artes marciales y es muy energético con sus vecinos. Su vida cambia mientras que en un atardecer encuentra próximo a él a una niña llamada Lala-Ru. Ella es una niña apática y callada que es perseguida por unos sujetos que provienen de un tiempo futuro mediante un portal. Shu, se impresiona, pero reacciona instintivamente haciendo todo lo posible para proteger a Lala-Ru y enfrentar a sus raptores. Lamentablemente él termina tan envuelto en la situación que ingresa al portal y viaja a un futuro distópico, él encuentra un atardecer, solo que de un color rojizo y un sol enorme mientras ve el horizonte, donde no queda nada más que un gran desierto árido de edificios destruidos y una fortaleza en forma de torre alrededor de todo este ambiente desolador.
Personajes idealizados, pero bien representados
Uno de los aspectos que destaca Ima, Soko es en sus personajes, son arquetipos, pues cada uno simboliza un ideal extremo del ser humano. Partamos por Shu, su personalidad es como la de un protagonista de un shonen, es decir, que tiene una visión esperanzadora de la vida y siempre triunfa a pesar de las adversidades más difíciles y crueles que podría vivir un niño. Su forma de ser puede llegar a molestar de vez en cuando, especialmente en momentos donde las cosas le salen casualmente bien y porque simplemente es un personaje cuya personalidad no varía casi nunca, hay pocas cosas que rescatar de él si lo evaluamos como un personaje dentro de su historia. Pero lo que él representa ante nosotros, con el mensaje de la obra, es más trascendental ya que él tiene un rol que cumplir, incluso después del final de la serie, que nos deja con la interrogante: “Y ahora qué vas a hacer con tu vida, qué aprendiste después de todo lo que has vivido con esta historia”.
El antagonista principal es Hamdo, un dictador que no tambalea en tomar decisiones drásticas e incluso en torturar a niños o hacerles cosas peores Tiene una personalidad muy definida y sin cambio alguno que representa el otro extremo de la bondad y la empatía (como Shu) por otras personas. Él rige sobre una fortaleza llamada Hellywood (sí, suena como Hell) y busca obtener agua a toda costa pues es un bien muy preciado para la época, incluso para utilizarlo de combustible pues ya no quedan más fuentes de energía para obtener en el planeta. Su “salvación” es Lala-Ru, una niña muy enigmática que posee un pendiente en el cuello con una piedra azul especial que le otorga la capacidad de crear agua, ella ya perdió esperanza alguna en la humanidad por el planeta muerto y en un principio siempre llegaba a la conclusión de que ella no puede hacer nada por ayudar a las personas, pues solo han sobrevivido los más despiadados e inhumanos pues siempre utilizan el agua como medio de explotación y como energía para someter a otros humanos.
Los personajes secundarios no se encuentran muy por detrás pues tienen casi tanta relevancia (o incluso más) que los protagonistas. Del lado de los niños del futuro tenemos a Nabuca que “aprendió” a obedecer órdenes y forma parte del ejército infantil de Hambo, son entrenados desde pequeños y les doblegan su voluntad para matar con tal de sobrevivir. Sara es el personaje más especial (no voy a dar menciones de spoiler) pues inicialmente se presenta como otra niña que llegó al futuro como Shu, solo que en su caso fue porque la confundieron con Lala-ru. Su vida está representada en la tragedia, es el personaje más humano pues en la historia vive y actúa como alguien de su edad (confundida y con mucha ira), incluso en los momentos donde ella comienza a madurar después de todas las desgracias que vivió. Personalmente la considero mi personaje favorito de Ima, Soko porque su forma de ser es digna de admirar, nadie en esta historia aprendió tanto como ella. A pesar de que no es un personaje principal, es de los más memorables.
Un mensaje del futuro hacia el presente
La historia realmente empieza luego del viaje temporal hacia el futuro. Mientras conocemos su mundo y las personas que habitan en la fortaleza nos damos con muchas sorpresas, pues en su gran mayoría son niños como el protagonista. El modo de gobierno de este lugar es propio de una dictadura, que inicialmente tenía buenos ideales pero progresivamente se fue degenerando a un esclavismo solapado, nadie es realmente libre aquí, todos son dominados de alguna manera, incluso para pensar, actuar y tener criterio para diferenciar lo bueno de lo malo.
El desarrollo de la trama se establece principalmente en Hellywood en su búsqueda por más agua, en el trayecto habrá invasiones, sometimiento de pueblos y violaciones contra sus derechos humanos (incluido los niños). Pero algo en lo que resalta esta serie es en mostrar un pequeño rayo de luz para cada situación deprimente, casi todos en esta historia perdieron las esperanzas de volver a tener un mundo civilizado, sin embargo para la segunda mitad de la serie nos muestra la otra cara de la moneda donde apreciamos una verdadera lucha entre ideales. Hellywood solo representa una parte de la realidad, sus habitantes buscan sobrevivir sometiendo a otros bajo la expectativa de tener el dominio de todo el planeta.
Lo que sucede en esta historia es muy verosímil a nuestro presente, muchos buscan someter a naciones enteras, incluso en tener control directo e indirecto sobre sus propios habitantes con tal de que la verdad sobre el gobierno no se revele.
Apartado artístico
Este es el apartado donde más tambalea Ima, Soko. Esta serie no tiene un opening, su banda sonora es limitada y suelen repetir temas una y otra vez, esto no quita el hecho de que algunos sean temas muy buenos. El ending de “Lullaby...” de Reiko Yasuhara es lo más destacable, probablemente su letra y mensaje es el mejor que nos puede dejar esta obra al terminar de verla. Pues, a diferencia de la ambientación futurista de la serie, nos encontramos con tomas de ambientes del pueblo de Shu en la actualidad mientras una melodiosa voz nos habla como una madre a su hijo pidiéndole que no hiera a otros y proteja al mundo que le dio la oportunidad de nacer. Ciertamente es un mensaje muy breve y simple pero muy reflexivo luego de cada episodio que terminamos de ver, es como una abofeteada al corazón para reaccionar ante el poco aprecio que se le tiene a nuestra Tierra.
Siempre, siempre. Yo te estaré cuidando
Así que tranquilízate y ve a dormir
Nos hemos acostumbrado a hacernos daño
En este mundo donde naciste y te di a luz
Visualmente se ve decente, sus personajes tienen diseños sencillos, pero definidos que resaltan muy bien sus expresiones. La animación es aceptable, en verdad este tipo de series no necesita de mucha labor en esto pues toma más enfoque en sus personajes mientras que la ambientación está establecida en tres lugares que solemos ver recurrentemente, tiene algunos planos con fondos estáticos para los momentos importantes donde los personajes dialogan y toman más énfasis en sus rostros.
Reflexiones
Si hablamos de géneros, el sci fi está entre mis preferidos (especialmente por el cyberpunk). Esta serie es una muestra de las consecuencias que trae el uso de la tecnología, y si nos vamos a una comparativa con el cyberpunk (donde hay un palpable avance tecnológico y de deshumanización), en esta historia se expone la degradación final que podría tener una historia cyberpunk cuando el mundo se dejó llevar por la tecnología y la deshumanización que por la bondad, el buen criterio y la paz. Ima, soko demuestra el punto final de una civilización autodestructiva, si lo llevamos a una reflexión, es lo peor que nos podría pasar como especie, al punto cercano de la extinción convirtiéndonos en verdaderos monstruos.
Nota personal
8.7/10
kjmn
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