Ficha en MAL
Introducción
Saludos cordiales a todos. ¿Cuántas veces han escuchado la frase “lo que importa es el viaje, no la destinación”? Seguramente muchísimas, y puede que en algunas ocasiones para justificar un final mediocre o poco satisfactorio. De todas formas, yo estoy muy de acuerdo con aquel dicho. Lo importante al emprender un largo viaje es justamente lo que sucede en el trayecto de éste, y ningún anime lo ejemplifica mejor que Kino no Tabi: The Beautiful World. Es más, el énfasis está tan depositado en el viaje en sí que la obra ni siquiera necesita un destino. Todo se trata de la fantástica travesía.
Argumento
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| Kino de joven, para que no les quepa duda de que es mujer |
Bueno, la estructura de la serie es bastante simple. Kino (quien es una chica, lo cual espero que sea ya sabido a estas alturas) viaja de ciudad en ciudad con su motocicleta parlante Hermes, se quedan tres días y dos noches, conocen a la gente y las costumbres de la ciudad, y se largan para continuar su aventura.
¿A dónde se dirige Kino? A ninguna parte en particular, solo quiere ver el mundo. ¿Hay relación entre un episodio y otro? Muy rara vez. En general cada capítulo se nos presenta una historia autoconclusiva, por lo que la obra puede considerarse más una colección de cuentos independientes. Así es, la serie es episódica y no tiene una continuidad muy definida. Esto es algo que hace que no sea una serie para todos, pues hay muchas personas que no disfrutan de esta modalidad.
Pero para los que lo hacen, verán una colección de historias muy creativas, con numerosos mensajes capaces de hacernos reflexionar por un buen tiempo. Y es que el ingenio con el que algunas de ellas fueron escritas es digno de alabanza. Logran abarcar un montón de temáticas interesantes y críticas sociales de manera llevadera e inteligente, demostrando una creatividad que pocas veces vi en series de formato episódico.
Y es que lo que suele pasar con estas series es que muchos episodios pierdan relevancia, y muchas historias sean mucho menos interesantes o que las otras. No en Kino, donde, durante los 13 episodios originales, las dos ovas y la película, nos muestran que el autor estaba muy inspirado al momento de ocurrírsele tantas historias con trasfondos tan interesantes que hasta me atrevo a decir que cada una tendría potencial para producir obras enteras que traten sus temáticas más a fondo. Mencionarlas todas sería poco práctico, ya que cada episodio nos trae ideas frescas a la mesa, pero por mencionar algunas:
Hay una fuerte crítica a las religiones fundamentalistas, y a cómo éstas pueden interpretar sus escritos sagrados de la peor manera posible, lo cual terminaría de manera violenta y sangrienta. De hecho, el mensaje de que lo peligroso es la interpretación que se les da a estos documentos, y no los documentos en sí, es algo que se trata en más de un episodio de manera distinta y con enfoques diferentes, mas ingeniosos por igual.
Otra que me pareció muy interesante es la idea de si el trabajo por sí solo es algo que valga la pena, aunque éste no tenga ninguna utilidad. ¿Tiene éste valor por el simple hecho de representar el esfuerzo de una persona, y por lo tanto merece remuneración? Se los dejo para la clase de filosofía del pensamiento económico.
¿O qué hay de la idea de involucrar a terceros en los conflictos armados, con el fin de evitar hostilidad directa entre los perpetradores? ¿Y cómo reaccionarían las víctimas? Ideas que llevan a uno a pensar en conflictos como la Guerra Fría y las secuelas que ésta tiene hasta el día de hoy.
Y eso es solo la punta del iceberg, podemos encontrar críticas tanto al egoísmo como al altruismo, a la ambición como a la falta de ésta, la dependencia a la tecnología y el rechazo total a ésta, y un largo etcétera. La serie no deja títere con cabeza y no tiene miedo de ser cruel y brutal para presentar su punto. Y lo mejor es que, al ser problemáticas tan generales que tienen paralelismos con nuestro mundo, es muy fácil sentirse identificado y reflexionar por horas.
Como ven, es una serie madura y elocuente que presenta numerosos dilemas y filosofías discordantes, pero esto no quiere decir que no haya algo de acción en el camino. Después de todo, el mundo puede ser brutal en ocasiones, y es necesario que la protagonista sepa defenderse durante sus viajes, por lo cual podemos ver momentos de gran tensión en muchos episodios. Obviamente, no esperen ver peleas espectaculares ni nada por el estilo, pero la serie no son sólo diálogos y monólogos. Hay mucho más que eso.
Arte y Sonido
¿A dónde se dirige Kino? A ninguna parte en particular, solo quiere ver el mundo. ¿Hay relación entre un episodio y otro? Muy rara vez. En general cada capítulo se nos presenta una historia autoconclusiva, por lo que la obra puede considerarse más una colección de cuentos independientes. Así es, la serie es episódica y no tiene una continuidad muy definida. Esto es algo que hace que no sea una serie para todos, pues hay muchas personas que no disfrutan de esta modalidad.
Pero para los que lo hacen, verán una colección de historias muy creativas, con numerosos mensajes capaces de hacernos reflexionar por un buen tiempo. Y es que el ingenio con el que algunas de ellas fueron escritas es digno de alabanza. Logran abarcar un montón de temáticas interesantes y críticas sociales de manera llevadera e inteligente, demostrando una creatividad que pocas veces vi en series de formato episódico.
Y es que lo que suele pasar con estas series es que muchos episodios pierdan relevancia, y muchas historias sean mucho menos interesantes o que las otras. No en Kino, donde, durante los 13 episodios originales, las dos ovas y la película, nos muestran que el autor estaba muy inspirado al momento de ocurrírsele tantas historias con trasfondos tan interesantes que hasta me atrevo a decir que cada una tendría potencial para producir obras enteras que traten sus temáticas más a fondo. Mencionarlas todas sería poco práctico, ya que cada episodio nos trae ideas frescas a la mesa, pero por mencionar algunas:
Hay una fuerte crítica a las religiones fundamentalistas, y a cómo éstas pueden interpretar sus escritos sagrados de la peor manera posible, lo cual terminaría de manera violenta y sangrienta. De hecho, el mensaje de que lo peligroso es la interpretación que se les da a estos documentos, y no los documentos en sí, es algo que se trata en más de un episodio de manera distinta y con enfoques diferentes, mas ingeniosos por igual.
Otra que me pareció muy interesante es la idea de si el trabajo por sí solo es algo que valga la pena, aunque éste no tenga ninguna utilidad. ¿Tiene éste valor por el simple hecho de representar el esfuerzo de una persona, y por lo tanto merece remuneración? Se los dejo para la clase de filosofía del pensamiento económico.
¿O qué hay de la idea de involucrar a terceros en los conflictos armados, con el fin de evitar hostilidad directa entre los perpetradores? ¿Y cómo reaccionarían las víctimas? Ideas que llevan a uno a pensar en conflictos como la Guerra Fría y las secuelas que ésta tiene hasta el día de hoy.
Y eso es solo la punta del iceberg, podemos encontrar críticas tanto al egoísmo como al altruismo, a la ambición como a la falta de ésta, la dependencia a la tecnología y el rechazo total a ésta, y un largo etcétera. La serie no deja títere con cabeza y no tiene miedo de ser cruel y brutal para presentar su punto. Y lo mejor es que, al ser problemáticas tan generales que tienen paralelismos con nuestro mundo, es muy fácil sentirse identificado y reflexionar por horas.
Como ven, es una serie madura y elocuente que presenta numerosos dilemas y filosofías discordantes, pero esto no quiere decir que no haya algo de acción en el camino. Después de todo, el mundo puede ser brutal en ocasiones, y es necesario que la protagonista sepa defenderse durante sus viajes, por lo cual podemos ver momentos de gran tensión en muchos episodios. Obviamente, no esperen ver peleas espectaculares ni nada por el estilo, pero la serie no son sólo diálogos y monólogos. Hay mucho más que eso.
Arte y Sonido
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| El país de los furros |
Bueno, convengamos que es una serie que tiene ya 15 años y producida por un estudio no muy prominente. El apartado técnico no es del todo pulido y muestra un poco la edad, sí. La animación (fuera de la película, que fue hecha por el estudio Shaft) es tosca en general. Pero no es que se vea mal ni nada por el estilo, solo advierto que si eres exageradamente crítico en ese aspecto, puede que te incomode un poco.
Pero de todas formas, en mi opinión la serie se ve muy bien, ya que el estilo caricaturesco que tiene calza a la perfección con el tipo de serie calmada que es, pero a la vez puede expresar sus momentos oscuros con mucho éxito. Sobre todo los colores apagados y tenues que usaron, con muchas matices de verde y marrón, son muy adecuados.
La música también es bastante agradable, siendo destacable por ser atmosférica y relajante, y tiene un opening y ending memorables, si bien bastante calmados.
Personajes
Pero de todas formas, en mi opinión la serie se ve muy bien, ya que el estilo caricaturesco que tiene calza a la perfección con el tipo de serie calmada que es, pero a la vez puede expresar sus momentos oscuros con mucho éxito. Sobre todo los colores apagados y tenues que usaron, con muchas matices de verde y marrón, son muy adecuados.
La música también es bastante agradable, siendo destacable por ser atmosférica y relajante, y tiene un opening y ending memorables, si bien bastante calmados.
Personajes
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| Kino montada en Hermes |
Bien, la cosa de Kino es que suele tomar el rol de un observador completamente imparcial, siendo una persona muy estoica y a penas reaccionando a las injusticias con las que se encuentra. Esto puede hacerla un personaje muy controversial, ya que muchos pueden verla como una persona fría y apática, e incluso puede caerte mal por su falta de reacción a muchos eventos capaces de darle una punzada en el pecho a cualquiera.
Sin embargo, a mí me parece que de eso se trata justamente el personaje. No está ahí para emitir su juicio de valor respecto a las situaciones con las que se encuentra, si no para que veamos el mundo a través de sus ojos, para hacer algún comentario puntual en cada lugar, pero no inmiscuirse de sobremanera en éste.
Esto no quiere decir que carece de emociones ni nada por el estilo. Es más, cuando la situación es lo suficientemente intensa, Kino es capaz de dejar que sus reacciones salgan a flote y pueda mostrarse triste o perturbada. Lo cual subraya de buena manera la gravedad de la situación, al ser capaz de llegar a romper esa muralla que Kino puso para resguardar su ser.
Otro punto a destacar es que, aún habiendo presenciado tantos eventos desgarradores en su vida, Kino no es alguien pesimista ni con semblante amargo. De hecho, muestra una inocente curiosidad por los lugares que visita, es amable y gentil, si bien un muy seria, y sobre todo, disfruta plenamente de su vida y de observar a las diferentes personas costumbres con las que se topa.
En cuanto a la historia de Kino, ésta es revelada en un par de flashbacks, los cuales, además de revelar que es una chica (ni me molesto en ocultarlo, todo el mundo lo sabe ya), nos dan un vistazo de por qué piensa de la manera en que lo hace, por qué tiene aquel característico aspecto andrógino, y muestran facetas del personaje muy interesantes.
El viaje lo emprende con su motocicleta parlante, Hermes. ¿Por qué puede hablar? Pues porque sí, y punto. Es parte del realismo mágico en el que la serie parece tomar lugar. Hermes simplemente está como método de transporte de Kino, y para manifestar confusión (y a veces burlas, cretina la motito) sobre el comportamiento humano. Y cabe mencionar que la voz casi infantil que le asignaron, de alguna manera, encaja a la perfección.
Conclusión
Sin embargo, a mí me parece que de eso se trata justamente el personaje. No está ahí para emitir su juicio de valor respecto a las situaciones con las que se encuentra, si no para que veamos el mundo a través de sus ojos, para hacer algún comentario puntual en cada lugar, pero no inmiscuirse de sobremanera en éste.
Esto no quiere decir que carece de emociones ni nada por el estilo. Es más, cuando la situación es lo suficientemente intensa, Kino es capaz de dejar que sus reacciones salgan a flote y pueda mostrarse triste o perturbada. Lo cual subraya de buena manera la gravedad de la situación, al ser capaz de llegar a romper esa muralla que Kino puso para resguardar su ser.
Otro punto a destacar es que, aún habiendo presenciado tantos eventos desgarradores en su vida, Kino no es alguien pesimista ni con semblante amargo. De hecho, muestra una inocente curiosidad por los lugares que visita, es amable y gentil, si bien un muy seria, y sobre todo, disfruta plenamente de su vida y de observar a las diferentes personas costumbres con las que se topa.
En cuanto a la historia de Kino, ésta es revelada en un par de flashbacks, los cuales, además de revelar que es una chica (ni me molesto en ocultarlo, todo el mundo lo sabe ya), nos dan un vistazo de por qué piensa de la manera en que lo hace, por qué tiene aquel característico aspecto andrógino, y muestran facetas del personaje muy interesantes.
El viaje lo emprende con su motocicleta parlante, Hermes. ¿Por qué puede hablar? Pues porque sí, y punto. Es parte del realismo mágico en el que la serie parece tomar lugar. Hermes simplemente está como método de transporte de Kino, y para manifestar confusión (y a veces burlas, cretina la motito) sobre el comportamiento humano. Y cabe mencionar que la voz casi infantil que le asignaron, de alguna manera, encaja a la perfección.
Conclusión
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| "¡Un perro que habla!", dijo la moto que habla |
Kino no Tabi es una obra que puede presumir de ser extremadamente astuta e intrigante, pero al mismo tiempo tranquilizante. Una obra muy madura y fresca, con conceptos interesantes que te harán comerte la cabeza durante horas después de haber acabado. Y sobre todo, representa muy bien aquel sentimiento de que, aún con todas nuestras fallas, los seres humanos, nuestras costumbres y nuestras acciones, son muy interesantes.
vbffb
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