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- Reseña: Fate/Stay Night: UBW
Escrita por:
Unknown
Los chicos de Ufotable siguen con su tradición de adaptar los mejores trabajos de Type-Moon
INTRODUCCIÓN
La historia de Fate y sus adaptaciones es muy larga. Sé que hay gente que ya la sabe, pero esto apunta a quienes no vieron la serie y no tienen idea de qué hacer. F/SN: UBW está basado en una novela visual desarrollado por la multiplataforma Type-Moon y escrita por Nasu. Este juego en particular fue primero adaptado en el año 2006 por Studio Deen. No hace falta que les diga que Studio Deen hizo un desastre con la adaptación. Una animación de mierda, personajes insoportables y mezclaba rutas de la historia al punto que los fans del material original estaban furiosos y quiénes no habían jugado los juegos no le encontraban sentido a lo que estaba pasando. Más tarde, en el año 2010, Deen adaptó lo mismo en formato de película, por lo que esta segunda versión quedo rusheada e igual de mala que la original. Finalmente Type-Moon, tras los constantes fracasos de Deen y haber visto el excelentísimo trabajo que hizo Ufotable con “el jardín de los pecadores”, decidió darle a esos muchachos Fate/Zero, serie que agradó tanto a los fans del material original como a los casuales que no conocían la franquicia. En el 2014 decidieron darle a esa misma gente el material que le habían dado a Deen, ¿y cómo resultaron las cosas con Ufotable? Bueno, vamos a ver.
La serie fue dirigida por Takahiro Miura, quien participó en los otros súper-proyectos de Ufotable. La historia fue hecha en tres partes. Primero un OVA con el que empieza la serie y luego dos temporadas televisivas, con un total de 25 episodios.
La trama se enfoca en Toosaka Rin y Emiya Shirou, dos estudiantes de secundaria que son hechiceros. Por distintas razones y situaciones, ambos entran en un torneo en el que 7 magos pelean a muerte por el Santo Grial, un objeto capaz de conceder deseos. En este torneo, cada mago puede invocar un “sirviente” para que pelee a su lado, y así toma lugar la historia.
Toosaka Rin (izquierda) y Emiya Shirou (derecha). |
ARTE Y ANIMACIÓN
La animación de esta serie es, a falta de una palabra mejor, alucinante. Ufotable son famosos por tener una fluidez de movimiento espectacular, uso excelente de efectos visuales, y luces realmente impresionantes. Si hay algo que esta gente tiene es plata para hacer grandes proyectos y mucho talento para hacer que esa plata valga la pena.
Los escenarios son maravillosos. Tanto los planos de la ciudad de Fuyuki como la capilla, la escuela y el parque, están perfectamente armados con una paleta de colores oscura que contrasta de manera fenomenal con las luces increíbles que a Ufotable le encanta meter, además que logran resaltar a los personajes (hechos con una paleta brillante y limpia) sin dejar de lado los fondos.
Respecto al CG, déjenme decirles que no soy fanático ni partidario del mismo. Soy un elitista puro y como tal no me gustan dibujitos de computadora sobre mis dibujos chinos. Pero en este caso se nota que es de alto presupuesto, y no se usa de forma abusiva, por lo que no tengo para quejarme.
En el departamento artístico la serie se siente floja. No porque se vea mal (de hecho ya le tire flores a toda la animación) pero porque no tiene un estilo muy definido, salvo por la paleta oscura. Y esto se nota mucho, sobretodo, en los personajes que, aunque bien hechos, tienen un diseño de anime básico. Esto está relacionado con el tipo de serie que es F:SN/UBW, no es algo experimental o profundamente artístico, pero me gustaría ver la plata de Ufotable invertida en innovar.
Lo que hace ufotable en esta serie es de lo mejor, en términos visuales, de los últimos quince años. |
MÚSICA Y SONIDO
La música la compuso Hideyuki Fukasawa. Lo cierto es que la banda sonora está bien, pero no es algo particularmente fascinante ni tampoco algo que resalte entre el montón, y me parece que las mejores partes del OST se debieron a la co-compositora Yuki Kajiura. Para los que no la conocen, está señorita es de lo mejor en términos de composición en la industria y tiene bajo su cinturón algunas de las mejores bandas sonoras de la historia. Sinceramente, no entiendo por qué no dejaron que se ocupara completamente de la música.
El sonido es, naturalmente, pulido y limpio, y los efectos están muy bien usados y con muchísima intensidad en los momentos correctos. Respecto al uso de los temas musicales…meh…En general están bien colocados y son un buen acompañamiento para la animación, pero no tienen una sincronización destacable con las distintas escenas. Las actuaciones de voz son buenas, no tengo mucho para decir respecto a ellas.
HISTORIA
La historia de la serie es decente. Lo cierto es que pretende ser una obra monumental sobre un thriller psicológico lleno de sufrimiento y peleas con sentido épico, cuando en realidad es un harem (bastante pedorro) que tiene peleas porque Ufotable puede pagarlas, y para hacer que la demográfica de chicos adolescentes esté más interesado en el producto. No es ni tan serio, ni tan maduro, ni tan complejo como los fans dicen. El drama es forzado y lo más importante resulta ser, al final, la relación de Shirou con Rin, lo que es bastante decepcionante si tomamos en cuenta el enorme potencial que tenía la premisa, y todas las cosas muchísimo más interesantes que estaban ocurriendo alrededor de la pareja principal.
El anime abusa del uso de pandering otaku, entre escuelas secundarias, personajes femeninos arquetípicos, términos de juegos de computadora, romance pedorro, y un protagonista horriblemente blando. Todo esto desacelera el ritmo y llena la pantalla de situaciones aburridas, estúpidas e innecesarias (un día de campo, una momento pseudo-erótico, comedia boluda, etcétera, etcétera). A esto se le suman los plotholes (especialmente referidas a Archer) que la serie parece deleitarse en acumular, y un uso indiscriminado y obsceno de plot armor, con nuestro protagonista zafando de cualquier situación por cuestiones de la trama. Al final todo se reduce a “chico bueno tiene que salvar al mundo del chico malo” solo que con palabras raras y situaciones sin explicación.
Obligatorias escenas de fanservice como esta, están por toda la serie. |
Como puntos positivos hay que decir que la idea de un torneo a muerte con súper-poderes, terminología de videojuegos y seres invocados de otras dimensiones es muy atractiva y da lugar a acción excitante y la creación de personajes cargados con carisma. Cuando se pone las pilas, el anime avanza con un ritmo demoledor, y te engancha entre misterios competentemente armados y peleas de alto presupuesto con coreografía inteligente y música orquestal. Los giros que tiene son a veces entretenidos, y a veces pareciera que el escritor se los sacó del culo.
Creo que el principal problema que tuvo la historia fue su superficialidad. Dependía de las escenas de acción y de giros puestos en episodios particulares, cosa que fue una base muy blanda para armar una trama profunda y compleja con mensaje serio y sentido humano, y en su lugar hicieron la adaptación de una novela ligera con buen presupuesto.
PERSONAJES
Donde la serie verdaderamente se cae sobre su cara es en los personajes. Empezando por lo positivo, el personaje de Archer es fenomenal. Tiene personalidad definida, carisma, motivaciones claras justificadas con un trasfondo bien armado (aunque lleno de agujeros narrativos) y a lo largo de la historia tiene un desarrollo bueno y satisfactorio, a pesar de que tiene ciertos momentos y situaciones ridículos y sin mucho sentido.
Saber no es un personaje malo, pero es horriblemente básico y en cualquier otro anime quedaría opacada por el resto del cast. Este no es el caso ya que el resto de los personajes (con su simpleza y blandura general) elevan su carisma. Su trasfondo es absolutamente inaccesible salvo que estés familiarizado con el resto de los trabajos de Fate y por eso, sus motivaciones se sienten vacías y son de hecho incomprensibles, lo que está mal porque se supone esta es una historia en sí misma. Su desarrollo aparece también incompleto, excepto para aquellos que conocen la franquicia y las otras historias. Aún así Saber está bien, tiene su pizca de encanto y parece que todo el mundo la quiere como waifu.
Saber (izquierda) y Archer (derecha). Lejos, los mejores personajes de la serie. |
La pareja principal es el verdadero problema, y la primera razón por la que no termino de comprar el anime. Y yo no tengo problema con tener una pareja con intenciones amorosas ocupando el primer plano, pero para hacerlo bien es necesario que esa pareja tenga una dinámica que funciona y sea interesante.
El personaje de Shirou está bien armado, pero está mal usado. Es un chico de secundaria con poderes mágicos (bastante inútil como mago, valga aclarar) que quiere que todo el mundo sea feliz y poder salvar a todas las personas de la maldad del Santo Grial. Sin embargo a medida que avanza la historia, no se hace más fuerte (de hecho sobrevive por la ayuda de otros o porque de repente se vuelve todopoderoso por requisitos de la historia) ni cambia su perspectiva del mundo. Los personajes estáticos, es decir sin desarrollo, sólo sirven si tienen una personalidad multi-dimensional perfectamente armada y chorrean carisma, y este no es el caso.
Toosaka Rin es un personaje espantoso, y está mal hecho por donde se la mire. Su personalidad está horriblemente definida. Cambia constantemente y carece de consistencia; un episodio conviene que sea de una forma y al siguiente al escritor le parece mejor que se comporte de otra. Es una tsundere pero nunca explican porque ni cómo llegó a ese punto. Las motivaciones que tiene o no existen o son una estupidez. El trasfondo es básico y no tiene explicación, y carece completamente de desarrollo. Es un pedazo de cartón en el que se escribe lo que se necesita para cada episodio y encontrarle sentido a lo que hace es imposible.
La dinámica entre los dos es la típica relación entre una tsundere y un protagonista beta, muy de novela ligera. |
xv
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